MALAI, UN NUEVO BIOMATERIAL QUE INCLUSO PODRÍAS COMER!
En el camino hacia la sostenibilidad, estoy continuamente investigando y testando materiales innovadores para mis colecciones de bolsos y complementos de moda. Exploro nuevas formas de desarrollo de productos, siempre desde un enfoque artesanal. Mi objetivo es tener el control total de la vida útil del producto, desde su origen hasta su inevitable deterioro.
Los problemas causados por los plásticos convencionales basados en el petróleo son cada vez más evidentes: el alto consumo de energía y recursos, la contaminación del medio ambiente y la aceleración del cambio climático ya no deben ser ignorados.
Las actuales investigaciones sobre la producción y el consumo excesivo nos llevan a la conclusión de que la biodegradabilidad puede resolver el problema de un sistema capitalista basado en la constante búsqueda de la novedad y el consumo de tendencias efímeras de usar y tirar.
Pero y si la producción pudiese ser ecológica? ¿Qué pasaría si pudieses utilizar tu producto, después de usarlo, para fertilizar las plantas?
Como diseñadora de complementos D-RAÍZ intento introducir materiales y procedimientos sostenibles en los que toda la cadena de valor participe activamente en las diferentes fases de desarrollo del producto. Hago hincapié en integrar diseño, innovación y nuevos materiales a la artesanía, con métodos de producción lentos.
Después del Piñatex®, llega a mis manos el Malai, un material bio-compuesto elaborado con celulosa bacteriana orgánica. Esta celulosa se cultiva a partir de residuos agrícolas procedentes de los cultivos de coco en el sur de la India.
LA BELLEZA DE LOS MATERIALES NATURALES
Inspirándose en la belleza de los materiales naturales, una pequeña start up de la República Checa trabaja en colaboración con los agricultores del sur de la India, que proporcionan el agua de coco residual, el principal recurso necesario para iniciar el crecimiento de la celulosa bacteriana, que finalmente se transformará en Malai. También colaboran con las comunidades locales de fabricantes, además de trabajar con proveedores cuyo enfoque ético es transparente y está verificado.
Sabías que una pequeña unidad de procesamiento de coco puede recolectar 4.000 litros de agua por día, los cuales pueden ser usados para hacer 320 metros cuadrados de Malai?
Malai es un material biocompuesto flexible y duradero con una sensación comparable al cuero o al papel. Es resistente al agua y debido a que no contiene absolutamente ningún compuesto artificial, no causará alergias, intolerancias o enfermedades. Es un producto completamente vegano y, como tal, incluso podrías comerlo!
Un producto elaborado con Malai durará muchos años si se lo cuida adecuadamente; sin embargo, si deseas desecharlo, simplemente puedes colocarlo con la basura compostable y se descompondrá naturalmente.